¿Qué debo saber sobre los disruptores endocrinos?

La Organización Mundial de la Salud (OMS) define un disruptor endocrino como “una sustancia exógena o mezcla que altera la función del sistema endocrino y, por tanto, causa efectos adversos sobre la salud en un organismo intacto, o en su progenie, o en la (sub)población”.

Se ha considerado que algunos ingredientes utilizados en los cosméticos son “disruptores endocrinos”. Esto se debe a que pueden imitar algunas de las propiedades de nuestras hormonas o, en condiciones experimentales, tienen el potencial de interactuar con partes del sistema endocrino. Estas condiciones no tienen relación con la vida real.

El hecho de que una sustancia pueda imitar a una hormona no significa que vaya a provocar alteraciones en el sistema endocrino. Actualmente no hay pruebas de que niveles bajos de sustancias con capacidad de imitación, incluyendo sustancias naturales, puedan dañar la salud humana.

Las rigurosas evaluaciones de seguridad de los productos llevadas a cabo por expertos científicos cualificados que las empresas están legalmente obligadas a realizar cubren todos los riesgos potenciales, incluyendo posibles alteraciones endocrinas.

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